Yo creía que nada me iba a sorprender al lado de casa y ¡zascas! me voy a la Marcha Cicloturista de Mollet y me encuentro con esta joya cicloturista.

Mal entendido cicloturismo

El mundo del cicloturismo da para mucho y, además, con posturas confrontadas.

Los hay que piensan que si hay chip ya nos es cicloturismo, que si son carreras encubiertas, que si es ciclismo ciclodeportivo ya no es cicloturismo,…

Pero también los hay de los que piensan que una marcha cicloturista de velocidad controlada con reagrupamientos y sin chips es aburrida, que no tiene alicientes, que son formatos con pocos kilómetros insulsos y sin retos que te motiven.

Y en cualquiera de estos casos, en muchas ocasiones, nos olvidamos de lo principal: de las personas. Una marcha será mejor o peor, disfrutaremos más o menos, se nos hará más interesante o aburrida en función de las personas con las que vayamos y con la que luego compartamos el día.

Ya en octubre, si ya no has cumplido tus restos deportivos puede que pienses que te quedan pocas oportunidades. Pero tanto si los has cumplido como si no, este arranque otoñal te permite disfrutar de auténticas joyas desconocidas del cicloturismo, tanto por recorridos como por las personas que allí se dan cita. Marchas que pueden hacer de un recorrido aparentemente insulso en todo un reto deportivo y una experiencia personal increíble.

Para ejemplo… la Marcha Cicloturista de Mollet

Este domingo pasado asistí a la XXVII Marcha Cicloturista de Mollet Memorial Pelegrí Pi. Una asignatura pendiente de estos últimos años, que ya fuera por una razón u otra iba dejando de lado para mejor ocasión. Y mira que la ilusión que transmite Germán Viejo, capo de la cita, es contagiosa. Pero aun así la iba posponiendo. ¡Craso error!

Pero este año ha caído. Y la verdad es que me ha sorprendido… ¡y mucho! Tanto el recorrido (exigente), como los alicientes en modo de subida imposible tipo pared (tan de moda en la Vuelta) como ha sido la dura subida a Granera, como la compañía (tanto del Velo, como de participantes, como de organización)… han hecho de esta Marcha Cicloturista de Mollet una auténtica experiencia para recordar y para repetir.

En total han sido 95 km con algo más de 1.900 m de desnivel (según mi strava), datos que dicen bien a las claras lo exigente del trazado. Una ruta deliciosa por carreteras que no han dejado de sorprenderme. Y mira que la zona ya la conocía un poco por salidas con el Velo y por temas de trabajo.

Rodando sin presión… ¿o con presión?

El formato de esta Marcha Cicloturista de Mollet, como ya os hemos dicho, es de velocidad controlada. Eso hace que ya de principio te olvides de tiempos. Por nuestra parte, los 4 Velos que hemos asistido nos lo hemos tomado con otro talante.

Miguel ha sido el más díscolo y ha optado por ir por delante, mientras que Dani, Manolo y yo nos lo hemos tomado con más “tranquilidad”, rodando a cola de marcha y sintiendo la “presión”, siempre amable, de la ambulancia y el coche escoba.

Y las comillas las pongo por que el recorrido no ha permitido mucha relajación y la presión ha sido anecdótica y por no estar acostumbrado, al menos en mi caso, a rodar tan atrás. ¡Ja ja ja!

Ir en esas condiciones te permite compartir aun más la ruta con la gente que te rodea, reírte, hacer vídeos y fotos desde la cuenta, disfrutar de momentos únicos que de otra manera se pasan sin darnos cuenta.

De la organización de esta Marcha Cicloturista de Mollet sólo decir que un 10. Conocer a Germán personalmente puede que no me haga ser imparcial, pero el despliegue de medios (tanto de material como humano) es impresionante. Y no lo digo por decirlo, lo digo por comparación con la Marcha Cicloturista Solidaria (inscríbete AQUÍ) que organizamos para el 16 de octubre.

Sin duda un gran trabajo de esta gente del Club ciclista Plana Lladó. Se han convertido en un auténtico referente para nosotros, un ejemplo a seguir y a modelar. ¡Mucho trabajo nos queda para llegar a su nivel!

Por cierto, aunque fuimos de los últimos en llegar, Manolo y yo lo hicimos a lo Sagan. Bueno, ¡mejor que él! Ya que levantamos las dos ruedas. ¡Esto si que es espectáculo sobre dos ruedas!

El premio final al Velo Club como entidad participativa de este evento (¿o a la performance?), fue el colofón ideal a una gran matinal de cicloturismo, de esas que no deseas que se acaben nunca. La Marcha Cicloturista de Mollet es un cita 100×100 recomendable. ¡De verdad! ¡Buen trabajo compañeros y amigos!

Dale al me gusta, comparte y déjame tus comentarios. Y si quieres vivir una experiencia similar (o al menos eso vamos a intentar) te esperamos en la 4ª Marcha Cicloturista Solidaria Velo Club Fundación Alba Pérez (inscríbete AQUÍ).

NA Fotos Ciclismo Ninja y propias.