Con mis piernas y el reto 2015, quebrantahuesos y 3 naciones se dan las manos para sumar kilómetros solidarios. La aventura ha empezado. ¿Te sumas?

Mucho trabajo detrás

Echo la mirada atrás y se me pone la piel de gallina. Llevo muchos meses pensando en el fin de semana del 20 y 21 de junio. Deseando que llegue pero al mismo tiempo sin quererlo porque lo efímero del momento hace que se pase sin darnos cuenta.

Miles de kilómetros, miles de horas de entrenamiento, frío, calor, miedos, incertidumbres, hitos que han ido cayendo con el paso de los días, de las semanas y de los meses, todo un compendio de situaciones y sensaciones que nos han llevado hasta el punto en el que estamos.

Todo lo que estaba en nuestras mano ya está hecho. Las líneas de salida de la quebrantahuesos y las 3 naciones ya están pintadas. Nos esperan pacientemente para vernos salir y, también, ¡cómo no!, las de llegada para veros tocar el cielo, vernos tocar nuestra gloria personal.

Mucho trabajo queda detrás. Mucha ilusión por delante.

quebrantahuesos y 3 naciones

Cuando Javi me dijo en el mes de febrero que me cedía su invitación para asistir a la quebrantahuesos, a parte de no creérmelo y sentirme un privilegiado, ya que me había quedado fuera en el sorteo, un sensación agridulce me invadió. Y es que el calendario que me había marcado de marchas tenía la vacante de la quebrantahuesos pero tenía las 3 naciones. Desgraciadamente coincidían en el mismo fin de semana.

En marzo aun no sabes como vas a estar de forma, aunque mi anhelo era el de estar al 100×100. Meses después, a finales de mayo, ya se vislumbra como se llegará, aunque certeza no se tiene.

¿Renunciar a 3 naciones? Una pregunta que me daba vueltas en la cabeza. La quebrantahuesos es el mito. Las 3 naciones es la primera marcha cicloturista en la que participé, ¡y de eso hace ya la friolera de 25 años.

Causalidades de la vida. El mismo año que nació la quebrantahuesos, ese mismo año probé lo que es una marcha en el corazón del Pirineo, fue mi bautismo de fuego. Fue la primera vez que crucé la frontera en bicicleta. Una frontera que me tiene cautivado hasta la fecha de hoy.

Así que no he podido no caer en la tentación. ¿Por qué no hacer las dos? Así podré celebrar mi 25 aniversario de mi primera participación en una marcha ciclista, mi nacimiento como cicloturista, con el 25 aniversario de la quebrantahuesos, el nacimiento del mito.

Y todo ello de la mano del reto 2015 kilometros solidarios. Una bonita manera de reinventar el cicloturismo y concienciar de qué mejorar el mundo está sólo en nuestras manos. 13 horas de bicicleta, 350 kilómetros por delante, 5.000 metros de desnivel para escalar… todo un reto a cumplir. Sabiñáñigo y Puigcerdá, dos poblaciones unidas ahora por un reto solidario.

A partir de la semana que viene ya os iré contando cómo me ha ido esta experiencia. Os contaré desde los preparativos del fin de semana, el viaje de un sitio a otro, la gente que he conocido del Team Bike Extrem Asociación Alba Pérez, las sensaciones encima de la bicicleta y todos los contactos que he hecho, ¡por qué también he ido a trabajar para la marcha cicloturista solidaria que se celebrará el 18 de julio en L’Hospitalet de Llobregat!

Muchas cosas que contar que podréis leer a la vuelta de este mágico finde semana. Dale al me-gusta y compártelo.

¡Nos vemos a la vuelta! ¡Salud y pedales a todos!

Si Alba lucha… ¡Yo lucho! ¿Y TU?