El pasado domingo tuvo lugar una concentración en Barcelona reivindicando ante las autoridades la necesidad de poder practicar el ciclismo de forma segura.

Hay que ser agradecido

Me pongo a escribir este artículo cuando sólo han pasado 24 horas desde que finalizó la concentración ciclista realizada ayer en Arco de Triunfo de Barcelona para reivindicar la necesidad de poder practicar ciclismo con seguridad en cualquiera de sus modalidades, ya sea deportiva o urbana.

He recibido multitud de mensajes de apoyo al respecto, pero creo justo reconocer la valía de otros compañeros ciclistas que han puesto su empeño en que esta iniciativa tirara adelante. Y es que aunque nadie se lo crea, el empeño en primera persona para que el proyecto planteado desde ADECIS saliera adelante ha venido de la mano de 4 personas.

José María Caroz. Es la base jurídica de este proyecto. Además de conocer todo los entresijos del mundo federativo y conocer a infinidad de personas del mundillo del ciclismo, es el artífice de articular de forma magistral un discurso en el que todos los ciclistas nos vemos identificados.

Manuel Méndez. Cicloturista empedernido y amante de todo lo relacionado con el mundo de la bicicleta. El blog, la plataforma de facebook o twiter, la divulgación del mensaje o todo el sistema sonoro en la concentración no hubiera sido posible sin él.

Albert García. 25 años reivindicando desde el ciclismo urbano que la bicicleta tiene que ser un elemento vertebrador de la sociedad le avalan.

Y un servidor, que tengo que reconocer, he ido en muchas ocasiones a remolque de estos monstruos para poder seguirles la rueda. Mi aportación ha sido divulgar y compartir toda la información generada.

También creo justo reconocer el apoyo de la Federación Catalana de Ciclismo, Federación Catalana de Triatlón, ConBici, Amics de la Bicicleta, Coordinadora Catalana de Usuarios de la Bicicleta, Asociación de Ciclistas Profesionales, RFEC, el Gremio de Comerciantes de Bicicletas de Cataluña y HandBike Barcelona. También remarcar la cesión de material por parte de Vallas Zamora.

Y sobre todo quería agradecer a todos aquellos que creen en la necesidad de reivindicar un ciclismo seguro, tanto a los que estuvieron presentes (no os citaré porque seguro que me dejo a alguien), como a los que estuvieron de forma virtual a través de las redes sociales porque la distancia les impedía estar presentes, como a todos aquellos que no asistieron pero que aman de igual manera este deporte.

También quiero mencionar a la presencia de la familia de Toni Torres, fallecido el pasado 2 de mayo como consecuencia de un atropello mientras montaba en bicicleta, por su entereza y apoyo al acto.

También quiero agradecer a aquellos que auguraron la imposibilidad de unir el ciclismo federativo con el ciclismo urbano en un mismo acto reivindicativo como fue este.

A todos os doy las gracias por espolearnos a tirar adelante.

El ciclismo necesita más

Este acto sólo ha sido un principio. La asistencia nos hubiera gustado que hubiera sido mayor. Pero no se puede obligar a nadie a hacer algo que no quiere o que no le apetece. Las cosas han de salir del corazón.

Pero el impacto mediático ha sido espectacular. Ser entrevistados en los días previos por Radio Vilanova o RNE en el programa de Pilar Sampietro nos pilló por sorpresa. Pero salir el domingo en el telediario de la Primera, el de la noche, es algo increíble por tratarse del de más audiencia. El lunes ha salido el evento en las publicaciones en papel de El Periódico, La Vanguardia o el Mundo Deportivo, así como en multitud de portales como los de Barcelona TV o TV3.

Ahora toca seguir trabajando, haciendo pedagogía entre nuestras filas, aunar sensibilidades, articular un discurso de unidad bajo el paraguas de #1MetroyMedio y convocar la mayor de las manifestaciones de ciclistas de la historia de España.

Y es que si no aprovechamos el periodo electoral que se avecina a finales de este año, dejaremos escapar una oportunidad única e irrepetible para conseguir compromisos políticos reales en torno a la bicicleta, máxime teniendo en cuenta lo apretado de las encuestas, donde cada voto cuenta más de lo nos imaginamos.

Es el momento de darle salida a proyectos de reciente creación repartidos por la península, uniendo esfuerzos y ganas con todas aquellas otras plataformas, e incluso federaciones, que llevan ya mucho tiempo en la brecha peleando por un ciclismo seguro.

De la unión nace la fuerza. Estoy convencido y mis compañeros también.

Un ciclismo seguro es posible… ¡Y lo sabes!